Tiempo después pinté de nuevo esta vista de la viña con nuestra casa al fondo. Anulé los almendros del bancal de arriba y procuré, como en esas peliculas de David Lean donde se oye constantemente el viento, que todo estuviera invadido de corriente.
En nuestra pequeña viña casi siempre hace viento, hay un nogal enorme en un rincón junto a un pozo (por eso es enorme) que compartimos con un tío mío. Las cepas tienen unos cuarenta años, se replantaron cuando la filoxera arrasó las viejas. El pie que se plantó fue chasselas y el injerto (de escudo) lo realizó un vecino de Llenes que se dedicaba a ello. Murió hace unos años.
El cuadro está en casa de mi amigo Pedro.
Hola pareja, una gran inicitiva y muy interesante. Respecto de tus pinturas, ya sabes lo que opino (ya estamos pensando donde colocar la siguiente), y si encima lo mezclas con el mundo de la viña, el campo, historias familiares.... me resulta mas atractivo todavía (un Falcon Crest a lo alicantino). Procuraré seguiros regularmente. Suerte y ánimo con este nuevo proyecto.
ResponderEliminarSalud.
Jorge