Viñas viejas

Hace un año rodamos en esta viña...



¿Desde cuando han estado ahí
Reapareciendo cada invierno
mientras se funde y evapora
su cansado y acuoso frío vegetal?
Apuntalando el sucio corte blanco
La jugosa y robusta entraña
Diseminada sobre la piedra caliza.
Levantándose por las esquinas
A partir de su profunda herida
Que las divide y separa
Y familiariza para los estúpidos...
Un constante y molesto aleteo
Indefinido y aletargado
Una costra cayendo esparcida
entre el inagotado terroir.

Descabezado

Me encanta trabajar desde los límites del color, en el inicio de todo, cuando lo blanco empieza a verse como una vida líquida hasta convertirse en una ardiente y espesa lava roja. Es el mejor rojo que puede encontrarse y como no, sale de la tierra a borbotones...


Un autorretrato mío con sexo de mujer.

Micorriza

Resulta curioso lo de la necesaria micorrización de las orquídeas, su estrecha dependencia y su capacidad simbiótica...

Todos esos microbios y microorganismos que hacen posible la nutrición de las raíces y la futura originalidad de los terruños...

Alquimia

"Quedarse con la idea de que el alquimista es un mero fabricante de oro es tan poco atinado como reducir el oficio de viticultor al de fabricante de vino corriente. Esta profesión poseía antaño un precioso saber, basado en el conocimiento de una lejana génesis de elementos y substancias y de la manera de servirse de ellos. Todo lo que se dirija a un segundo plano viviente podrá prestarnos un gran servicio a la hora de reequilibrar los crecientes desórdenes, que ya no podrán ser curados si nos limitamos al plano de lo puramente material"

Nicolas Joly, "El vino del cielo a la tierra"

En muchas ocasiones he intentado descubrir los mecanismos internos, ocultos y nada transparentes que me conducen a elegir una determinada forma o color, esos elementos y substancias de las que servirse a la hora de conferir vida a una montaña o a un barranco...
Y ocurre que necesariamente desequilibro y desordeno.

Temperatura

Las primeras orquídeas que aparecen este año, apenas separadas un par de metros, dos ophrys fuscas bastante diferentes...

Siempre me hacen pensar en tres cosas: fuego, insecto y sexo...